El equilibrio




A veces vamos por la vida dando tumbos, de un lado para otro, sin prestar atención, callendo una y otra vez, nos levantamos medio mareados y cuando creemos que ya estamos estables volvemos a perder el centro y caemos.
Y todo por no prestar atención, por no parar un momento para fijar la vista en un punto y mantener el equilibrio.
Aprender a mantener el equilibrio es fácil, sólo hace falta, estar quietos, dejar de pensar, enraizar bien los pies, anclar la vista a un punto y practicar con paciencia y amabilidad hacia nosotros mismos.
Todos podemos mantenernos en equilibrio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario